miércoles, 16 de febrero de 2011

LA HISTORIA IGNORADA DE ESCOCIA

Un escritor, un país



por James Kelman
Autor, entre otros, de You have to be careful in the land of the free, Hamish Hamilton, Londres, 2004. Véase en español Un desafecto, Circe, Barcelona, 1991.
Traducción: Gustavo Recalde

Cuando Kelman recibió el Booker Prize, en 1994, uno de los jurados del prestigioso premio literario, contrariado, renunció. Tiempo después, “Times” lo trató de “salvaje iletrado”, lo que no le impediría convertirse en el escritor escocés más influyente, quien supo conjugar la lengua popular, el lirismo sabio, el compromiso colérico y la ironía.


Mejor poner las cartas sobre la mesa: no voté en las últimas elecciones legislativas británicas. Ni en las anteriores. Ni en las que las precedieron. Nunca participo en las elecciones británicas. De vez en cuando me gusta hacerme el payaso, pero prefiero hacerlo con mis nietos. Suele suponerse que aquellos que, como yo, toman esta decisión, son apolíticos. Nos dicen: pero ¡Usted tiene que votar! ¡Hombres y mujeres murieron para que usted tenga derecho al voto! Es verdadero o falso, según el punto de vista, pero lo que revela este tipo de afirmación es el desconocimiento de la historia de la izquierda radical. El antiparlamentarismo es la dimensión olvidada del movimiento socialista en Escocia. La mayoría de la gente no sabe absolutamente nada al respecto. Y esperan que gente como yo deje de hablar sobre ello para cambiar de tema. Con ideas semejantes, uno se encuentra aislado, salvo que esté directamente comprometido. La historia popular prefiere claramente a los guerreros en kilt que idolatran a los jefes de los clanes y condenan a sus hijos y a los hijos de sus hijos a una eterna sumisión.

Bases perdidas

La situación causa gracia, cuando se sabe que el Iluminismo escocés (1) se fundó en el valor de la percepción individual. En otros tiempos, se alentaba a los jóvenes a hacer preguntas. Hoy aprenden el respeto intelectual, si no la obediencia; nuestro sistema educativo perdió sus propias bases en favor del modelo anglo-estadounidense.
La filosofía, que trata sobre la historia intelectual de la humanidad, debería ser una materia fundamental de la enseñanza. Nos permite ver dónde nos encontramos y puede revelarnos la causa de algunos de nuestros errores, lo que ayuda eventualmente a no repetirlos. Es tan pertinente para descifrar el mundo contemporáneo que ya no se la ofrece a la mayoría de nuestros estudiantes.
El racionalismo de Descartes tuvo una importancia fundamental en la tradición intelectual escocesa. Su método se basaba en el juicio introspectivo, pero no superaba el estadio del propio sujeto. Para los representantes de la filosofía escocesa, observar sus propios procesos de pensamiento no fue suficiente. Buscaron tener en cuenta los procesos de pensamiento de los demás “con el fin de ver el mundo como lo ven los otros”.
Los niños escoceses crecen en la ignorancia de nuestra cultura y nuestras tradiciones. Nuestra literatura proviene del campo de los “especialistas”, incluso en Escocia. La mayoría de quienes controlan la burocracia cultural comparten esta ignorancia. Que hayan nacido o no en Escocia no tiene nada que ver. Incorporaron de tal manera el punto de vista inglés que son incapaces de valorar una obra según la estética escocesa.
La máxima autoridad de la cultura en Escocia –su nuevo presidente-director general– ignoraba todo sobre nuestro ámbito cultural cuando le propusieron el cargo el año pasado. Tanto para él como para quienes lo contrataron, dicho cargo no requería el menor conocimiento de nuestras obras.
Norman McCaig es uno de los poetas escoceses más importantes del siglo pasado. Para el centenario de su nacimiento, la BBC aceptó dedicarle un programa, con la condición de que fuera el humorista Billy Connolly (2) quien lo presentara. El establishment es perfectamente incapaz de hacer una distinción entre nuestros artistas; en cambio, sabe detectar perfectamente su nivel de celebridad... Poco importa lo que la justifique.
Durantes años, el Citizens Theatre de Glasgow fue la vidriera del arte dramático en Escocia, cuya política oficial era no producir ninguna obra escocesa, lo que no sorprendía: por definición, el arte local no era simplemente inferior, era intrínsecamente inexistente. La decisión de Citizens era la prueba de su “posicionamiento en el plano internacional”, en otras palabras, de su éxito.
Llegados a la edad adulta, es por casualidad o de oídas que nos enteramos de la existencia de la historia radical. Tenía casi 30 años, ya era un autor publicado, cuando descubrí que hubo una insurrección escocesa en 1819. Fue una sorpresa. Escribí una obra de teatro para dar a conocer “la noticia”.
La realidad de la lucha política rara vez se inserta en el debate público. Comprometerse es “participar” en las elecciones o afiliarse a un partido. Pero cuando se mencionan las estrategias alternativas que el Estado está dispuesto a adoptar cada vez que es necesario, ya no hay rastros de reacción: ¿Qué sucedió sin embargo con la violencia sufrida por los mineros en huelga, el pueblo de Irlanda del Norte, los inmigrantes y los solicitantes de asilo? ¿Qué sucedió con los muertos en prisión preventiva, el racismo institucional, la colusión con el capital que permite que miles de obreros mueran a causa de enfermedades laborales y accidentes de trabajo? ¿Con los recortes de subsidios que generan el aumento del analfabetismo, la mortalidad infantil, el sufrimiento de las personas mayores? ¿Con la degradación de nuestros jóvenes que, una vez que visten el uniforme, son entrenados para humillar, torturar y asesinar, y luego enviados al extranjero con el fin de proteger y fortalecer los intereses de la clase dirigente y el capital?
Hoy estos problemas no son necesariamente “políticos”. Las diferencias ideológicas entre los partidos de gobierno son insignificantes, si no nulas. Los debates de fondo recaen sobre cuestiones de gestión.

Detrás de la mascarada

En tiempos de guerra, las grandes empresas buscan sobrevivir, cualquiera sea la salida. Mantienen una relación con cada uno de los adversarios y se organizan para preservar su seguridad e incrementar sus beneficios. El Estado funciona de la misma manera. Busca controlar todo el abanico de opiniones políticas. El cambio es siempre posible, pero el cambio revolucionario, incontrolable, no podría permitirse. El Estado está atento a lo que puede afectarlo en la modificación del orden social, y reacciona reforzando el orden existente. El primer objetivo del Estado es sobrevivir, y el gobierno opera en su nombre. Las formas de pensamiento cambian con el correr de los tiempos. Pero hay constantes. La existencia de instancias dirigentes es una de estas constantes. El Estado, que las representa, está integrado por gestores provenientes de la gran burguesía, que operan junto a la élite y en nombre del capital. El derecho a la explotación de las masas se ve beneficiado con un estatuto hereditario, encarnado por la supuesta “familia real” y la aristocracia en general. Su existencia legitima desigualdades sociales de tal dimensión que suelen silenciarse. La “familia real” se vende al público como una fabulosa colección de parientes lejanos, a través de fragmentos de información difundidos día a día por los principales medios de comunicación. El tema se trata menos en período electoral. La herencia de las riquezas y de los privilegios, la idea de permanencia de la desigualdad carecen de actualidad cuando el discurso oficial se basa temporalmente en una idea diferente, la de la posibilidad de un cambio estructural por la vía parlamentaria.
Dos partidos proveen la alternancia en el gobierno: los laboristas y los conservadores, que ocupan respectivamente la centroizquierda y la centroderecha de “nuestro” sistema político. Se incita a la opinión pública a confundir al Partido Laborista con la “izquierda”. A veces sucede que individualidades con tendencia de izquierda integran el Partido Laborista, pero su izquierda termina en lo que tradicionalmente se denomina el “socialismo”. La máquina laborista debe directamente eliminar estas tendencias peligrosas. Es verdad que en otros tiempos los ciudadanos de izquierda lograban hacerse escuchar en el seno del Partido Laborista, pero esos tiempos pasaron. Por otra parte, en sus inicios, éste no era un partido sino una agrupación para la representación de las ideas de izquierda, transmitidas por una gran diversidad de voces proletarias y socialistas, sindicatos y grupos de extrema izquierda, incluyendo el Partido Comunista. La situación cambió desde fines de la Primera Guerra Mundial, cuando el Estado intensificó sus ataques contra la verdadera izquierda y el movimiento republicano, tal como lo vivió el pueblo irlandés cuando eligió al Sinn Féin para formar un gobierno en 1918.
Hubo muchos otros cambios a partir de este período, en Europa y en todo el mundo. El movimiento socialista vivió el desmoronamiento de la II Internacional frente a la ferviente ceguera patriótica que condujo a la masacre. Posteriormente, con el apoyo de los argumentos de Lenin y el Komintern, santificados por el éxito de la Revolución de Octubre, los socialistas se convencieron de que debían dejar de lado sus “prioridades locales”.
Existió a partir de entonces un camino semioficial hacia el socialismo, que incluía la participación en las elecciones organizadas por el Estado. Las demás formas de acción fueron ignoradas, marginadas o simplemente abandonadas.
La lucha por la justicia social cambió con el tiempo. Observemos dónde estamos y dónde estábamos: ¿avanzamos? Sin embargo, noventa años más tarde, los socialistas de todas partes siguen participando de esta mascarada.

Un asombroso parecido

Durante las elecciones legislativas de 2010, sólo uno de los cincuenta y nueve escaños de los que Escocia dispone en el Parlamento británico fue obtenido por un candidato conservador. Sea como sea, y gracias al apoyo del partido minoritario liberal-demócrata, es un gobierno de coalición dirigido por los conservadores el que hoy existe en Westminster. Los dirigentes de ambos partidos tienen aproximadamente la misma edad, recibieron más o menos la misma educación en las escuelas privadas preferidas por la clase dirigente, uno es un primo lejano de la reina Isabel II, el otro está vinculado a la aristocracia de la Rusia imperial: todo debió contribuir al acercamiento.
Esta coalición presenta un asombroso parecido a la “tercera vía”, muy pragmáticamente apoyada y defendida por los Estados británico y estadounidense durante la segunda mitad del siglo XX. Un apoyo que se traducía a la vez en la infiltración del movimiento laborista y socialista, el uso de revistas y editoriales con fines propagandísticos, y la manipulación del discurso intelectual en la esfera pública. Del mismo modo, la incorporación de personalidades influyentes que expresan la “diversidad social” se volvió crucial: industriales, capitalistas, militares; actores del campo religioso, cultural y político; dirigentes sindicales y estudiantes. Probablemente, tuvieron muchas diferencias políticas, pero compartían un conjunto de principios fundacionales: los supuestos “valores cristianos”, un capitalismo ético centrado en Dios, y un compromiso anticomunista destinado a garantizar su permanencia. Cada cuatro o cinco años, nuestros dirigentes se ven en parte obligados a someterse nuevamente al sufragio; algunos son reelegidos, otros no. Mientras tanto, los verdaderos negocios continúan. Tal como dije, prefiero hacerme el payaso con mis nietos.

1 Durante la segunda mitad del siglo XVIII, Escocia vivió un notable florecimiento intelectual, the Scottish Enlightenment (el Iluminismo escocés). David Hume, uno de los fundadores del empirismo moderno, es, junto con Adam Smith, su símbolo.
2 Autor de sketches y actor escocés.

J.K.

INFORME DIPLÓ II

EL LÍBANO EN LAS REDES DE UN “TRIBUNAL ESPECIAL”

Injerencias externas, divisiones religiosas





por Alain Gresh, enviado especial
De la redacción de Le Monde diplomatique, París.
Traducción: Gustavo Recalde
  
Mientras el fiscal del Tribunal Especial para el Líbano remitía al juez, el 17 de enero pasado, el acta de acusación sobre el asesinato de Rafic Hariri, la oposición derrocaba al gobierno de Saad Hariri e imponía un nuevo primer ministro. Estallaron enfrentamientos, y la situación, seguida de cerca por Israel y Siria, continúa siendo tensa.


Ese día de enero, todos los libaneses, clavados frente a las pantallas de sus televisores, seguían las escenas dignas de una película de espionaje que difundía el canal Al-Jadid. No se veían imágenes en movimiento: sólo las siluetas de los protagonistas de una reunión secreta y sus voces lejanas, inaudibles. La grabación se había realizado clandestinamente; los subtítulos se agregaron para que los telespectadores comprendieran cada palabra pronunciada. Saad Hariri conversaba con Mohammed Al-Saddik, un ex oficial de los servicios de inteligencia sirios.
El hombre desempeñó un papel clave durante los primeros meses de la investigación internacional que siguió al asesinato, el 14 de febrero de 2005, del ex Primer Ministro Rafic Hariri, padre de Saad; asesinato en el que todas las sospechas recayeron inmediatamente sobre Damasco. Al-Saddik contaba entonces en detalle las reuniones clandestinas de altos dirigentes sirios que planeaban el atentado, daba nombres, describía lugares, precisaba información. Sobre la base de su testimonio, cuatro oficiales superiores libaneses fueron detenidos y encarcelados desde abril de 2005 hasta agosto de 2009 (1).
A los investigadores les llevó varios meses reconocer, a su pesar, ya que el hombre compartía sus ideas, que Al-Saadik fantaseaba. Refugiado un tiempo en Francia, reclamado por Siria, encarcelado en Emiratos Árabes Unidos, se ocultaría en algún lugar de Europa. Quedan preguntas inquietantes: ¿por cuenta de quién actuó? ¿fue manipulado? ¿es simplemente un megalómano? ¿qué sucedió con todos aquellos que atestiguaron en el mismo sentido que él y que ahora son calificados de “testigos falsos”?
El programa de televisión no responde a estos interrogantes. Sin embargo, confirma que el oficial, no sólo conocía a Saad Hariri –algo que éste último siempre había negado–, sino que estaba en contacto permanente con él e incluso lo llamaba a su teléfono celular. Para mayor confusión, el canal Al-Jadid difundió las grabaciones de los testimonios, en principio confidenciales, de Hariri y de varios responsables libaneses ante la comisión de investigación de Naciones Unidas.

Medir con distinta vara

Omar Nashabe, cronista judicial del diario Al-Akhbar (2), explica: “En mayo de 2007, el Consejo de Seguridad de la ONU creó el Tribunal Especial para el Líbano (TEL) (3), que comenzó a funcionar en La Haya el 1º de marzo de 2009. Es excepcional en más de un aspecto: nunca se había implementado una instancia de justicia internacional para juzgar un crimen político (y otros veinte relacionados con éste). Los demás tribunales de este tipo deben juzgar crímenes de lesa humanidad, incluso genocidios. Éste ni siquiera tiene facultades para ocuparse de los crímenes que devastaron el Líbano a lo largo de las últimas décadas, y que nunca fueron sometidos a juicio. Además, el TEL cambia sus propias reglas cuando le conviene: así, en noviembre de 2010, introdujo la posibilidad, excluida en todos los demás tribunales internacionales, de juzgar a acusados en rebeldía”.
Para Nashabe, no debe olvidarse el origen de este tribunal ni el contexto en el cual comenzó la investigación sobre el asesinato de Hariri en 2005-2006. El entonces presidente estadounidense George W. Bush había decidido tras la invasión a Irak en 2003, crear un “nuevo Medio Oriente” y acabar con los regímenes enemigos, especialmente Siria. Encontró un aliado en Jacques Chirac, amigo personal de Rafic Hariri y deseoso de vengar su muerte. Esta determinación orientó la investigación, desde el comienzo, hacia un único culpable posible: Damasco. Unos años más tarde, mientras Bush y Chirac abandonaban la escena, el contexto cambió, pero el tribunal permanece. Y no ganó credibilidad.
Con más de trescientos empleados, absorbe recursos considerables: más de cincuenta millones de dólares durante el primer año, la mitad de dicha suma pagada por el Líbano. Padece luchas internas –especialmente entre el fiscal Daniel Bellemare y el juez Daniel Fransen–, renuncias en serie, filtraciones. Y, tal como lo señala un ex funcionario, “apenas el 10% de su personal es libanés o árabe. La mayoría de sus empleados no saben nada de la situación en la región y el país: ¿cómo podrían dirigir una investigación?”. Cabe entonces preguntarse: cuando Bellemare presentaba su acta de acusación mientras el gobierno renunciaba, ¿daba muestras de irresponsabilidad o de ignorancia?
Incluso el Dr. Mohammed Matar, reconocido abogado que dirige el grupo de defensores de Hariri ante el TEL, lo admite: “Todas las decisiones de Naciones Unidas en nuestra región están bajo sospecha, debido al ‘medir con distinta vara’ de Occidente. ¿Por qué un tribunal internacional juzgaría a los asesinos de Hariri y no a quienes mataron a mil trescientos civiles durante la guerra israelí de 2006? ¿Por qué decenas de resoluciones de Naciones Unidas sobre Palestina nunca se implementaron?”.
Sin embargo, sigue convencido de que es tiempo de acabar con la impunidad: “Si este proceso se inicia, permitirá poner muchas cosas sobre la mesa. En nuestro país, nunca hubo una reconciliación después de la guerra civil, como sucedió por ejemplo en Sudáfrica. El TEL dará a todos una lección, no sólo al Hezbollah. Todos fuimos partes interesadas de estos crímenes”.
Pero las facultades del tribunal siguen siendo limitadas. Por su parte, Nashabe recuerda un episodio significativo: “En el Líbano, quienes afirmaron su voluntad de acabar con la impunidad hicieron aprobar en julio de 2005, es decir, después del asesinato de Hariri, una ley de amnistía para Samir Geagea, reconocido culpable del asesinato de un Primer Ministro en ejercicio, Rachid Karamé, en 1987. ¿No es un enfoque selectivo de la justicia?”.

Un país dividido en dos

Estos debates no son nuevos y no impidieron a “mayoría” y “oposición” convivir en el seno de un gobierno de unión nacional entre mayo de 2009 y enero de 2011. Todos saben aquí que el país está dividido en dos y que es difícil gobernar contra la mitad de la población, sobre todo cuando las divisiones son mucho más religiosas que políticas. Ambos bandos se vigilan desde 2005, en una suerte de guerra civil silenciosa que, hasta ahora sigue siendo larvada.
En el primero, se encuentra el ex Primer Ministro Saad Hariri y la mayoría de la comunidad sunnita, así como Amine Gemayel y Samir Geagea, que representan a casi la mitad de los cristianos. Aliado de ellos hasta estos últimos meses, Walid Jumblatt, el líder de los drusos y jefe del Partido Socialista Progresista; los once diputados de su grupo permitieron a Hariri contar con una mayoría de 66 diputados (sobre 128), a la que se sumaron algunos independientes.
El segundo bando agrupa al Hezbollah y Amal (el movimiento político que dirige Nabih Berri, presidente del Parlamento) que movilizan al conjunto, o casi, de chiitas, así como al general Michel Aoun, apoyado por la otra mitad de los cristianos; una alianza que confirma, una vez más, la poca pertinencia de los análisis que ven en la oposición libanesa a un simple peón de Teherán.
Este ensamblaje entre mayoría y oposición, tanto más defectuoso cuanto que divide en parte el enfrentamiento regional entre Estados Unidos e Israel, por un lado, Siria e Irán por el otro, no resistió a los rumores sobre la acusación por parte del TEL de miembros del Hezbollah.
El 31 de marzo de 2010, el secretario general de la organización chiita, Hassan Nasrallah, reveló que miembros de su partido fueron escuchados por el fiscal del TEL en carácter de testigos. El 16 de julio pasado, anunció que Hariri le informó sobre la inminente acusación de cuadros de su partido. El Hezbollah ve allí un intento de desestabilización impulsado por Washington y Tel Aviv, que apunta al mismo objetivo que la guerra israelí del verano boreal de 2006: eliminarlo. Reclama pues al gobierno tanto la acusación de los “testigos falsos”, con el fin poner en claro las manipulaciones de la investigación, como la ruptura de las relaciones con el TEL. En un discurso televisado, Nasrallah denunció el papel de decenas de espías israelíes detenidos desde hace un año, que infiltraron especialmente a los operadores de telefonía celular (4). Así, acusa directamente a Tel Aviv y reprocha al fiscal Bellemare –los documentos de WikiLeaks confirmaron que trabajaba en contacto con Estados Unidos– descartar a priori la pista israelí.
Estas tensiones entre la mayoría y la oposición generaron un intento de mediación sirio-saudita. El 30 de julio de 2010, el rey de Arabia Saudita y el presidente sirio llegaron a Beirut a bordo del mismo avión; un gesto espectacular. El 6 de septiembre pasado, Hariri declaró al diario Al-Chark Al-Awsat que se equivocó al acusar a Siria del asesinato de su padre, y que dichas acusaciones eran “políticas”.
Cuatro hombres llevaron a cabo extensas negociaciones confidenciales: el rey Abdallah II (con la ayuda de su hijo Abdelaziz), el presidente sirio Bachar Al-Assad, Nasrallah y Hariri. En diciembre pasado, un acuerdo parecía esbozarse. El gobierno libanés denunciaría su cooperación con el TEL –lo que no le impediría seguir funcionando, ya que fue creado por Naciones Unidas–. A cambio, la oposición aceptaría dejar el campo libre a Hariri en su gestión muy cuestionada (despilfarro y corrupción) del país y no accionar judicialmente en el caso de los “testigos falsos”. Un acuerdo que en Beirut se resume en estos términos: “el tribunal contra el gobierno”.

A cualquier precio...

Sin embargo, a último momento, Hariri, ya dubitativo, se desdeciría. Porque, si bien París acepta el compromiso, Washington lo rechaza. El hombre clave de esta decisión es Jeffrey Feltman, secretario de Estado Adjunto para Medio Oriente y embajador en Beirut entre 2004 y 2008. Atestiguando ante una comisión del Senado estadounidense el 8 de junio de 2010, reconocía que su país había pagado 500 millones de dólares a todos aquellos que combatían al Hezbollah en el Líbano. Declaraba: “Desplegamos importantes esfuerzos diplomáticos, a través de la lucha antiterrorista y con ayuda material, para reducir la influencia y la amenaza del Hezbollah en la región y promover la paz, la estabilidad y la prosperidad a través de Medio Oriente” (5). Para Feltman, el combate iniciado por la administración Bush en el Líbano en 2005 debe continuar a cualquier precio. Parece no haber entendido que la situación cambió; a pesar de la visita de la embajadora estadounidense Maura Connelly a los diputados indecisos durante el mes de enero pasado para obtener la continuidad de Hariri –la injerencia en los asuntos internos libaneses no es exclusiva de Siria–, este último fue destituido, y ello, en el estricto respeto de la Constitución.
Con el apoyo de Jumblatt y algunos diputados independientes a mediados de enero pasado, la oposición obtuvo la designación al cargo de Primer Ministro de Najib Mikati, un dirigente sunnita, tal como lo exigen las reglas no escritas de la confesionalidad en el Líbano. Millonario, cercano al presidente Al-Assad pero también a Arabia Saudita, y habiendo ya ocupado brevemente ese cargo en 2005, Mikati no tendrá una tarea fácil, más aun cuando la antigua mayoría no parece dispuesta a entenderse con él, lo que lo obligaría a formar un gobierno con una base reducida, a menos que se conforme con un gabinete de tecnócratas. Sobre todo, corre el riesgo de ser blanco de la hostilidad de la mayoría de los sunnitas que, el 25 y 26 de enero últimos, expresó en las calles su cólera por la remoción de Hariri y lo que denuncian como el “control chiita” sobre el país. Y, si rompe relaciones con el TEL, puede temer que Estados Unidos, incluso la Unión Europea, promuevan la adopción de sanciones contra su país por no respetar las resoluciones de la ONU.
Si bien el Hezbollah puede alegrarse de la remoción de Hariri, su victoria es modesta e intentará mantener un perfil bajo en el futuro gobierno. No quiere ni provocar al radicalismo sunnita ni debilitar su posición en caso de un nuevo ataque israelí. Un editorialista de Jerusalem Postseñala que, en esta última hipótesis, contrariamente a lo que sucedió en 2006, el ejército israelí podría apuntar a toda la infraestructura civil, así como a los edificios oficiales del Estado con la excusa de que “el Hezbollah no sólo está en el gobierno: dirige el país. (...) Deberá pues pensarlo dos veces antes de lanzar contra Israel un ataque que tendría consecuencias devastadoras para el país del Cedro” (6).

Géraud de Geouffre de La Pradelle, Antoine Korkmaz y Rafaëlle Maison, “Douteuse instrumentalisation de la justice internationale au Liban”, Le Monde diplomatique, París, abril de 2007.
2 El diario publica mensualmente como suplemento Le Monde diplomatique en árabe. Robert Worth de The New York Times le dedicó un artículo elogioso: “Rarity in region, Lebanese paper dares to provoke”, 28-12-10.
3 Cinco de los quince miembros del Consejo de Seguridad se abstuvieron en ese momento: Rusia, China, Sudáfrica, Qatar e Indonesia.
4 La acusación del tribunal contra el Hezbollah se basaría en las escuchas de teléfonos celulares. Nasrallah da a entender que fueron manipuladas por los servicios de inteligencia israelíes.
5 Citado en “500 millions de dollars contre le Hezbollah”, Nouvelles d’Orient, Les blogs du Diplo, 30-6-10 (http://blog.mondediplo.net).
Yaakov Katz, “Concern but also opportunity in Lebanon”, Jersusalem Post, 26-1-11.

A.G.


 INFORME DIPLÓ I

lunes, 7 de febrero de 2011

Sudán del Sur: el reto de construir una nueva nación

Luego de años de guerra y penurias, los habitantes de Sudán del Sur tienen ahora la oportunidad de regocijarse con la confirmación este lunes de que la región se convertirá en julio próximo en un Estado independiente y, por ende, en la nación más joven de África y del mundo.



Sin embargo, aunque rico en petróleo, el nuevo país se enfrenta a enormes desafíos, en particular el subdesarrollo y las tensiones étnicas entre la diversidad de su población. Pero la determinación de los sureños de autogobernarse no pudo ser más clara.
En el reciente referendo, cuyos resultados finales fueron publicados este lunes, cerca del 99% votó a favor de la independencia.
Muchos sudaneses -como explica desde Jartum el corresponsal de la BBC James Copnall- rastrean los problemas a la época del colonialismo británico, cuando las dos regiones eran gobernadas por separado, pero mantenidas como una sola nación.
Copnall dice que muchos sudaneses del sur consideran este "matrimonio a la fuerza" como "una catástrofe".

Norte/Sur

Desde la independencia de Sudán en 1956, el sur se ha sentido excluido y ha sufrido dos guerras civiles, en las que un estimado de más de dos millones de personas han muerto.
El nuevo Estado nace de un parto difícil pero con una identidad marcada: la división es visible incluso desde el espacio.
Imágenes satelitales del país más grande de África muestran la aridez del norte, sólo aliviada por el fértil corredor del río Nilo, en contraste con los verdes de pastizales, pantanos y bosques tropicales en el sur.
Y más allá de la división geográfica está la separación cultural entre un norte más rico, musulmán de habla árabe, y un sur más pobre, cristiano y animista, devastado por años de conflicto y abandono.

Sólo el principio

La creación de Sudán del Sur es resultado el Acuerdo General de Paz de 2005 que puso fin a dos décadas de guerra civil.
Pero, como indica el corresponsal James Copnall, el anuncio de los resultados del referendo no es el final del camino.
De hecho, al menos medio centenar de personas murieron en Sudán del Sur este fin de semana después de tres días de lucha interna dentro del ejército nacional.
La violencia comenzó cerca de la ciudad fronteriza de Malakal, en el estado de Alto Nilo el jueves y se extendió a otros tres lugares, después de que soldados del sur se negaran a ser desarmados y trasladados hacia el norte en medio de una disputa sobre cuál ejército conservará la propiedad de los equipos militares.

El petróleo

Cuando asuma la presidencia de Sudán del Sur, el ex líder rebelde Salva Kiir tendrá que hacer gala de una amplia capacidad de negociación.
Aún quedan sobre la mesa de conversaciones entre Jartum y Juba, la capital del sur, temas como la ciudadanía del estimado de millón y medio de sureños residentes en el norte y, especialmente, el estatus el estatus de la región petrolífera de Abyei.

Sudán es el tercer mayor productor de petróleo de África subsahariana y más del 80% de las reservas de crudo conocidas del país se encuentran en el sur.
Los optimistas apuestan a que a ambas partes de Sudán le interesa el entendimiento porque, como todos los oleoductos recorren el norte, ambas partes se beneficiarían de lograr un acuerdo pragmático.
Así, como señala el periodista de la BBC Peter Martel, el petróleo -que fuera una fuerza motriz para la guerra en el pasado- podrá ser ahora el motor para la paz.
Por lo pronto, como manifiesta el periodista James Copnall la emoción dominante en el sur es, sin dudas, un enorme regocijo.

sábado, 5 de febrero de 2011

Manuela Perez Fernandez (1917-2004) parte I

Manuela Perez Fernandez, nació el 18 de marzo de 1917 en Beade, Ciudad de Vigo, Provincia de Pontevedra, Comunidad Autónoma de Galicia, del Reino de España. Hija de Benito Perez Alonso y Antonia Fernandez Alonso.Ya de niña sufrió la muerte de tres hermanos recién nacidos. Al morir su madre en el parto de su ultimo hijo,siendo ella muy joven se tuvo que hacer cargo de la crianza de sus otros 6 hermanos menores, Antonio, Argentina, Benito, Jose, Candida e Isolina. En su casa vivía junto a su abuela ( madre de su padre) Manuela Alonso y los hermanos de su padre. Su padre trabaja en una carbonera importante de Vigo, a la vez que se adentraba en la política de la ciudad. Por su trabajo estaba casi todo el día fuera de su hogar, por lo que ella lidiaba siempre con su abuela y su tíos, quienes le hacían la vida imposible. Paralelo a esto, conoció a un joven muchacho mayor 3 años, llamado Genaro. El venia de una familia de clase humilde, por lo que a su  padre no le agradaba la idea de su relación con el muchacho. Varias veces mando a matarlo, pero siempre, su futuros cuñados, Benito y Jose ''pepe'', lo salvaban. En tanto su padre no aceptaba a Genaro, ellos vivían un amor de novela, se dejaban sus cartas de amor, donde pudieran recogerlas, bajo piedra o en lugares que solo ellos sabían. El tiempo paso, y por esas cosas del destino, un 24 de Junio de 1937 con la aprobación de su padre, Manuela y Genaro se unen en matrimonio en la ciudad de Vigo. Al poco tiempo, en una cena familiar, alguien toca a la puerta. Benito abre la puerta, eran militares franquistas que no tuvieron piedad alguna. Mataron a disparos a su padre. Ellos decían que era un traidor a la Patria, que era ''republicano''. Lo cierto es que, al poco tiempo, quien era el mejor amigo de Benito ocupo su cargo tan importante en la carboneria, por lo que se olía que todo había sido una emboscada de su mismo amigo. Luego, Genaro es reclutado por las tropas franquistas para luchar en la que se llamaría ''Guerra Civil Española''. Dejando a su mujer quien esperaba un hijo de el.
El 18 de febrero de 1938, nacía el primogénito. Al que llamo Genaro Rodriguez Perez. Su padre pudo escaparse apenas por un tiempo de la guerra, pero al poco tiempo fue recapturado para ir nuevamente a la batalla.
Nuevamente, Manuela quedaba embarazada. En tanto ella seguía esperando el regreso con vida de su esposo, en las tierras de su padre, tierra que su abuela quería repartir entre sus hijos y arrebatárselas a sus nietos.
Un miércoles 5 de Julio de 1939, nacía su segundo hijo, al que llamo Benito en honor a su padre. Tiempo después, Genaro por fin pudo volver de la guerra que ya había concluido, con la victoria del régimen de Franco. La miseria había llenado a todo el país, con los despojos de la guerra. Era tal la pobreza, que un marqués reconocido, quiso comprarle a Manuela a su hijo menor, a Benitiño. A lo que ella no accedió.
Los años que siguieron fueron uno peor que el otro. Su abuela, y sus tíos, no hacían mas que hacerles la vida imposible. Les hacían maldades, embrujos y conjuros. No los querían, solo deseaban quitarles todo, quedarse con las tierras de su padre. En la cabeza del matrimonio, ya empezaba la idea de migrar. Su hermano, Benito, ya se había ido hacia unos años a un país de Sudamérica, Argentina. Ademas, uno de los hermanos de su padre también había migrado a una ciudad llama Cruz del Eje, en la provincia de Córdoba del mismo país. Una década mas soportaron, ya tenían todo armado. Era el momento de partir.
Con los papeles en regla, junto a su hermana menor, Isolina, sus dos hijos, Genaro y Benito, y su esposo, Genaro Rodriguez Abalde rumbo a la República Argentina.
Partieron del puerto de Vigo, a las Islas Canarias, luego hasta Brasil, y por fin llegaron al puerto de la Ciudad de Buenos Aires. El viaje tardo casi un mes.
Su rumbo era directo a Cruz del Eje, pero por gustos, decidieron quedarse en la Ciudad del Plata.
Allí vivieron los primeros años en un conventillo junto a otros inmigrantes de otros países también de la Europa posguerra. Cinco de los siete hermanos Perez Fernandez ya se habían instalado en Argentina, en tanto Antonio y Argentina, se quedaron en Vigo lidiando con su abuela, y resguardando sus tierras.









Día Mundial contra el Cáncer


El 4 de febrero es el Día Mundial contra el Cáncer.

Organización Mundial de la Salud


El cáncer es una de las principales causas de mortalidad en todo el mundo. La Organización Mundial de la Salud (OMS) calcula que, de no mediar intervención alguna, 84 millones de personas morirán de cáncer entre 2005 y 2015. Cada 4 de febrero, la OMS hace frente común con la Unión Internacional contra el Cáncer y, con el patrocinio de ésta, promueve medios para aliviar la carga mundial de la enfermedad. La prevención del cáncer y el aumento de la calidad de vida de los enfermos son temas recurrentes.
La OMS estima que un 40% de los cánceres podrían evitarse por el simple expediente de no consumir tabaco, hacer ejercicio regularmente y observar una dieta saludable. El tabaquismo es la principal causa evitable de cáncer en el mundo.

Temas del Día Mundial contra el Cáncer

  • 2008: Dar a los niños y jóvenes un ambiente libre de humo.
  • 2009: Fomentar un estilo de vida energía-equilibrada basado en una dieta sana y actividad física.
  • 2010: Más información sobre las vacunas contra los virus que causan cáncer (por ejemplo, vacunas contra el HPV).
  • 2011: Enseñar a los niños y adolescentes evitar los rayos UV para hacer una exposición al "sol inteligente".





martes, 1 de febrero de 2011

Dilma visita a Cristina, Brasil apuesta por Argentina


Veronica Smink
BBC Mundo, Cono Sur


Una acaba de alcanzar la presidencia y la otra está llegando al final de su primer mandato. Pero Dilma Rousseff y Cristina Fernández de Kirchner tienen algo en común: son las primeras jefas de Estado que llegaron a la presidencia de Brasil y Argentina, respectivamente, por el voto popular.
Las líderes de las dos mayores economías de América del Sur se reunieron este lunes por primera vez en Buenos Aires, en lo que constituyó el primer viaje al exterior de la mandataria brasileña.
Rousseff y Fernández se mostraron cálidas ante la prensa y aseguraron que buscarán profundizar el vínculo bilateral. No obstante, las mandatarias prefirieron no responder preguntas de los periodistas.
"Nuestro destino y el de la región están indisolublemente unidos al de Brasil y viceversa. Si hasta ahora la Argentina y Brasil estaban unidos, a partir de ahora lo estarán aún más", aseguró la presidenta argentina.
Por su parte, Rousseff explicó: "Mi primera visita es a este país porque considero que Brasil y Argentina son cruciales para transformar este siglo XXI en el siglo de América Latina. Son los dos mayores países de la región y presentan un gran potencial que América Latina puede aprovechar".
Según los analistas, más allá de las coincidencias entre sus mandatarias, todo hace prever que la relación entre los socios más grandes del Mercado Común del Sur (Mercosur) seguirá las mismas líneas que tuvo bajo el anterior gobierno brasileño de Luiz Inácio Lula da Silva.

Brasil afianza liderazgo

Si bien en los últimos años Brasil ha afianzado su papel como uno de los líderes mundiales emergentes, Rousseff optó por hacer su primer viaje al exterior no a Washington o a Pekín, sino a su vecina Argentina, con la que mantiene una relación que consideró "estratégica".

Para Jorge Castro, director del Instituto de Planeamiento Estratégico de Argentina, el país busca consolidar su liderazgo regional para fortalecer su papel internacional.
"Para Brasil, América del Sur es la plataforma a partir de la cual construye su condición de agente global. Y en América del Sur, el vínculo con Argentina es fundamental, y es por eso que tiene un carácter estratégico: porque va más allá de lo comercial y de lo económico", señaló a BBC Mundo.
Miguel De Luca, director de la Sociedad Argentina de Análisis Político (SAAP) coincidió: "Brasil quiere ser la puerta de entrada a Sudamérica", apuntó.

Acuerdos

Entre sus anuncios, Rousseff prometió habilitar a empresas argentinas para que participen de las multimillonarias licitaciones de obras y servicios relacionados con el Mundial de Fútbol 2014 y los Juegos Olímpicos de 2016, que se disputarán en Brasil.
Además, dijo que las compañías argentinas podrán participar en la exploración y explotación de los gigantescos yacimientos petrolíferos hallados en la plataforma marítima brasileña, conocidos como la "capa pre-sal".
De Luca afirmó a BBC Mundo que estos gestos demuestran el liderazgo de Brasil, porque buscan promover una mayor estabilidad y previsibilidad en los negocios del país más pequeño.
Los vecinos también firmaron una serie de acuerdos energéticos, incluyendo un convenio entre las agencias atómicas de ambos países para la construcción en Argentina de dos reactores nucleares con fines científicos.
Asimismo, acordaron poner en marcha a partir de 2012 la construcción de la hidroeléctrica de Garabí, en la frontera entre la provincia argentina de Corrientes y el estado brasileño de Rio Grande do Sul.

Comercio

Durante el encuentro se hicieron pocas referencias al comercio binacional, un tema que en el pasado causó asperezas entre el gobierno argentino y el de Lula.
Brasil es el principal mercado de las exportaciones argentinas. Sin embargo, la balanza comercial -que ronda los US$33.000 millones- dejó en 2010 un saldo negativo de US$3.400 millones para Buenos Aires.
Durante la conferencia de prensa las mandatarias no reiteraron las acusaciones mutuas que en el pasado se cruzaron ambos países sobre supuestas trabas a las importaciones.
En cambio, Fernández pidió "profundizar la integración productiva" entre los dos países.
Tampoco se habló sobre la posibilidad de que Brasil devalúe su moneda, el real, un riesgo sobre el que especuló la prensa argentina antes del arribo de la mandataria.

Coincidencias

Además de destacar su rol como las primeras presidentas femeninas que se reúnen en representación de Argentina y Brasil, Fernández y Rousseff también coincidieron en la importancia que le adjudican a los derechos humanos en sus agendas de gobierno.
En ese sentido, la líder argentina elogió la decisión de su par brasileña de reunirse con representantes de las Madres y las Abuelas de Plaza de Mayo.
"Eso la distingue como mujer, como política, como madre y como sujeto histórico", aseguró.
La presidenta brasileña, que formó parte de la guerrilla que luchó contra el gobierno militar de su país en los años 70, y fue apresada y torturada por tres años, prometió a poco de asumir que buscará investigar los crímenes del pasado.